Tras asumir la noticia de la infertilidad, las parejas que desean tener hijos deben plantearse la posibilidad de someterse a un tratamiento de reproducción asistida. Este proceso no es fácil y puede ocasionar dificultades en la pareja. El apoyo de un psicólogo clínico durante el tratamiento puede ser vital.
El trabajo fundamental del psicólogo, es ayudarles a pensar y apoyarles, ya que si están en un tratamiento, es porque a pesar del miedo, existe la esperanza de que sea posible. No se puede matar una ilusión si se está haciendo un tratamiento y poniendo todos los medios que los profesionales consideran adecuados. Entender sus miedos, que son objetivos, los tratamientos fallan, pero deben confiar en que las situaciones cada vez son diferentes, y que no pueden desde el miedo, matar algo que estar por llegar.
No se trata de hacer fantasías exageradas y negar realidades objetivas como pocos óvulos, calidad del embrión, abortos de repetición sin llegar a la semana doce, pero tampoco estar con todo este esfuerzo, si la realidad médica opta por hacer el tratamiento.
También se les debe ayudar a ser conscientes, de que aparte de ser padres y cuidarse desde el punto de vista médico, su vida de pareja está también en juego, y no deben abandonar su vida social y seguir haciendo planes mientras meditan otras opciones.
Problemas en la pareja cuando el tratamiento de reproducción asistida no da resultado
Si los tratamientos son fallidos y los profesionales médicos les sugieren pararse y les remiten a otros métodos posibles para ser padres, la confusión de la pareja aumenta y la toma de decisiones va cambiando poco a poco de dirección.
Es cuando la pareja va planteándose nuevas opciones que nunca antes se habían planteado, o al menos entre ellos, no lo habían puesto palabras. No estaba hablado de forma abierta y entre en juego la donación de gametos, la adopción o la paternidad subrogada.
Aquí el apoyo a la pareja, seria ver que desean y con que se sienten más cómodos. Quizás deban darse un tiempo para reflexionar y ver si su deseo de paternidad vas mas allá, del deseo de engendrar y preguntarse qué fuerzas tienen ellos para ser padres por otras vías y defender a sus hijos contra todo y sobre todo. Su capacidad de amar debe de estar por encima de su deseo de procrear.
Tipos de pareja que acuden a consulta psicológica durante un tratamiento de reproducción asistida
También es importante el tipo de pareja que acude a consulta y su trayectoria vital. Hay familias reconstituidas, padres divorciados con hijos incorporados al nuevo matrimonio, y la mujer necesita ser madre.
Aparte de querer formar una familia con su pareja y los hijos de esta, esta su deseo de maternidad para agradar a su marido y sentir que ella también aporta un hijo a la unidad familiar, y es válida como mujer.
La mujer es quien más precisa la ayuda psicológica en estos casos. Ella es quien debe pasar por todos los procesos médicos, ella es quien debe llevar al hijo en sus entrañas y retenerlo en su útero. La medicina ayuda, pero los fantasmas psíquicos también existen y hay que entender que está pasando.
No se trata solo de aplacar los síntomas de ansiedad, miedo y angustia. Se trata muchas veces, en definitiva de entender la causa psíquica, si existe, que puede impedir o ayudar a que el embarazo sea más sencillo.
Es importante hacer consciente lo inconsciente, por ejemplo puede existir miedo al parto, quizás porque sus madre murió cuando ella nació, miedo al embarazo y coger peso, porque de joven o adolescente tuvo dificultades con la alimentación.
Por estos motivos resulta tan importante contar con el apoyo de un psicólogo durante los tratamientos de reproducción asistida, ya que aparecen muchos sentimientos y pensamientos que pueden afectar a nivel individual y a la pareja.
María José García Rodríguez, psicóloga en Masquemedicos