Deshacerse del vello en diferentes zonas del cuerpo de una forma cómoda y rápida es posible con la depilación láser diodo. Este método es el más eficiente para eliminar el vello de manera permanente.
Es posible realizar este tipo de depilación en cualquier zona del cuerpo, incluyendo la zona genital. Las molestias con este tipo de láser son mínimas, ya que previo a la sesión, se aplica un anestésico tópico para que el proceso sea lo más cómodo posible para el paciente. Los resultados pueden observarse desde la primera sesión.
Antes de comenzar la depilación con láser diodo
Se realiza una historia clínica del paciente para determinar que no existe ninguna patología en su piel que pueda ser impedimento para realizar la depilación con láser diodo.
También se lleva a cabo una prueba de sensibilidad de la piel para conocer el nivel de tolerancia del paciente. El objetivo es observar si la piel manifiesta alguna reacción, para poder evitar lesiones y utilizar el láser en el nivel adecuado para cada persona.
Durante el tratamiento de depilación con láser diodo
El primer paso es aplicar un anestésico tópico, de esta forma se reducen las molestias. La energía del láser diodo se distribuye de manera uniforme sobre toda la superficie que se va a tratar. Esta técnica puede utilizarse en cualquier tipo de pelo, el calor destruirá el tallo y bulbo del vello evitando que vuelva a crecer.
Después del tratamiento de depilación con láser diodo
Al terminar la sesión el médico aplicará una crema hidratante. Es posible que tras cada sesión puede aparecer una leve irritación o inflamación en la zona tratada, pero esta desaparecerá al cabo de 72 horas.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
Cada sesión tiene una duración de 15 a 30 minutos, dependiendo de la zona. Las áreas más extensas como brazos, piernas o espalda, suelen requerir unos 30 minutos.
Dependiendo del área a tratar y de las características particulares de cada paciente, suelen ser necesarias 5 ó 6 sesiones para eliminar el vello. Sin embargo, los resultados son visibles desde la primera sesión.
Es importante recordar que este tratamiento debe ser realizado en una clínica especializada en medicina estética, y de la mano de un médico titulado. Además previamente es necesaria una historia clínica del paciente y una prueba de sensibilidad de la piel. Si por cualquier motivo no es posible realizar este tipo de depilación, se debe suspender el tratamiento y buscar otras opciones adecuadas.
Clínicas Dorsia, expertos en Medicina y Cirugía Estética
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