El deseo sexual en las mujeres puede disminuir por diversas causas: ansiedad, estrés, malestar o dolor físico, problemas en la pareja, depresión, baja autoestima, etc. En momentos puntuales esto puede ser normal, pero si la falta de apetito sexual se mantiene por más de seis meses, se trataría de un problema más serio, que requiere de la atención de un especialista.
Consejos para mejorar el deseo sexual femenino
Recibir terapia psicológica de la mano de un especialista en problemas de deseo sexual en las mujeres, es esencial para darles solución. Gracias al apoyo de este experto también es posible mejorar la comunicación en la pareja y solventar los conflictos entre ambos miembros de esta.
También es importante dar atención en el ámbito sexual. Pensar en el sexo de manera positiva es imprescindible. Cuando se piensa en el sexo de manera negativa las ganas de practicarlo desaparecen.
Otra de las claves es dedicar más tiempo a la interacción erótica y emocional en la pareja, se trata de dos aspectos muy importantes que con el tiempo se van descuidando. Planificar los encuentros sexuales con la pareja también puede ser de gran ayuda, ya que cuando existe una planificación entendemos que se trata de algo importante, que se debe cuidar y darle el espacio y tiempo que requiere.
Conocer el propio cuerpo y su respuesta sexual también es un punto importante para mantener una buena salud sexual, tener conciencia sobre él y encontrar los estímulos que desencadenan una respuesta a nivel cerebral.
Si es causado por ansiedad o estrés, la relajación, el afrontamiento cognitivo y la exposición progresiva, y la autoexploración, constituyen parte del proceso terapeutico para mejorar el deseo sexual en la mujer.
¿Viagra femenina?
En Estados Unidos ha sido aprobado, por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), el fármaco flibanserina (Boehringer Ingelheim), conocido popularmente como “píldora rosa” o “Viagra femenina”, aun existe el debate sobre si esta podrá comercializarse o no.
Según las opiniones de expertos en la materia, este medicamento podría ser eficaz en el tratamiento de la falta de deseo sexual, si el problema se aborda de una manera integral.
A pesar de ser comparada con la Viagra, la flibanserina tiene poco que ver con el fármaco indicado para los hombres.
La Viagra trabaja sobre el trastorno de la excitación en los hombres, es decir, problemas de disfunción eréctil, mientras que la flibanserina se indica para los problemas de deseo sexual, y no para el trastorno de excitación.
En los hombres la Viagra produce una vasodilatación aumentando el caudal en el pene. Entonces, cuando se produce la erección el hombre lo nota, y actúa en consecuencia sobre su propio deseo sexual.
En el caso de las mujeres es diferente, ya que la flibanserina funciona a nivel cerebral y actuando mediante los sistemas de dopamina, noradrenalina y serotonina. Este medicamento se ha estudiado como antidepresivo anteriormente, sin lograr los efectos deseados, pero se observó que producía aumentos en la líbido de la mujer.
Aún no se ha determinado si este medicamento se comercializará en un futuro próximo, mientras tanto el procedimiento indicado para mejorar el deseo sexual en las mujeres es seguir los consejos indicados, y acudir a la consulta de un especialista es la forma de dar solución a este problema y recuperar una vida sexual satisfactoria y saludable.
Clínicas Origen, especialistas en Psicología y Psiquiatría
Clínicas Origen en Masquemedicos
Ver comentarios (1)
Yo diría que nadie sabe como abordar la falta de deseo sexual femenino, entre otras cosas porque puede haber bastantes causas diferentes implicadas que produzcan el mismo síntoma, y los mecanismos no se conocen bien. Como en toda enfermedad que afecta al funcionamiento cerebral, conviene buscar causas orgánicas, que un internista haga un cribado exhaustivo de enfermedades, infecciosas, endocrinas, etc., luego, se puede proponer una larga temporada, meses, de abstinencia, de dejar de probar si gusta o no, abandono de tóxicos, alcohol, tabaco, y... ejercicio como la natación, a ver qué pasa. Dañino no sería. Agur