Existen dos tipos de coronas dentales entre las que podemos elegir, las coronas de zirconio y las de metal-cerámica, estas últimas son generalmente, de menor precio.
La tendencia en muchos pacientes es elegir las coronas de zirconio, con la creencia de que por ser más caras serán mejores, pero esto no exactamente es así. A continuación lo explicamos en detalle.
¿Cuál es la vida útil de una corona de zirconio y de una metal-cerámica?
La duración de una corona dental depende de muchos factores, siendo el material el menos importante de ellos.
En este sentido no existen diferencias entre las coronas de zirconio y las de metal-cerámica. Lo más importante para que la vida útil de una corona dental sea larga, es que la raíz esté sana, y que la endodoncia se haya realizado correctamente.
La talla que se realice a la pieza sobre la que se colocará la corona, también será un factor determinante en la duración de este.
Así mismo, es de suma importancia que la medida que se envía al protésico dental, es decir, la impresión, haya sido tomada correctamente.
Por supuesto, el trabajo del protésico dental es muy importante. En el taller deben fabricar una corona bien ajustada, con los puntos de contacto adecuados con los dientes contiguos, y con un color, maquillaje y altura de oclusión perfectos.
Así, para conseguir una corona con una alta durabilidad, intervienen diversos factores, si alguno de ellos falla la corona no durará, se meterá comida entre los dientes o se irritan las encías.
¿Qué tipo de corona dental es más estética?
Las coronas de zirconio no tienen por qué ser más estéticas que las coronas de metal-cerámica, y viceversa. Igual que la durabilidad de esta pieza dental artificial depende en gran parte del médico que realice el tratamiento y del protésico dental que las fabrique, su aspecto estético también.
Es importante que la endodoncia, talla y toma de medidas hayan sido realizadas correctamente, así como el trabajo de fabricación de la corona.
Hoy en día los profesionales cuentan con máquinas que ayudan en la fabricación de las prótesis, pero el proceso final es totalmente artesanal, de ahí que la habilidad y sensibilidad artística de quien lleva a cabo esta tarea, sea un factor decisivo en el aspecto de la corona.
Un buen protésico dental es capaz de elaborar una corona igual de estética, ya sea fabricada en zirconio o en metal-cerámica. Si la talla y la adaptación a la encía son correctas, en la corona de metal-cerámica no se verá el cuello del diente, o una línea oscura.
En los casos en los que a causa del paso del tiempo, se produzca una descalificación, los cuellos de los dientes quedan al descubierto. Por lo que ningún tipo de corona dental conservará su estética.
Si estás pensando en ponerte una corona dental, acude a una consulta especializada en odontología estética, para determinar cuál es el mejor tratamiento en tu caso, para que puedas conseguir la sonrisa perfecta que deseas.
Clínica Dental Rafael Menéndez
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