Conozco tus miedos, mi madre también los tuvo. Como los tenían los padres de los pacientes que he tratado.
Tienes miedo porque crees que tu hijo volverá a consumir algún día. Tienes miedo porque sabes que si tu hijo consume, llega sumido en la desesperación y el dolor inhumano, pasando posteriormente unos días infernales. Tienes miedo por si algún día no logra volver a casa, por si le ocurre algo trágico. Tienes miedo por si se hunde aún más en el abismo y no es capaz de levantarse nunca más. Tienes miedo de no volver a recuperar nunca a tu maravilloso hijo. Tienes miedo a no poder soportar más dolor por el sufrimiento de tu hijo, a que no podáis vivir la vida que os merecéis. Tienes miedo a que no pueda cumplir sus sueños, a que no vuelva a sentir la alegría de vivir. Tienes miedo porque habéis probado distintas terapias que no han funcionado, porque sientes que no vas a ser capaz de ayudarle a ser una nueva persona, libre por fin.
Muchos padres y madres sufrieron esos mismos miedos. Mi madre también los sufrió, pero los fuimos venciendo juntos. Si ellos pudieron hacerlo, si nosotros pudimos hacerlo, tú y tu hijo también podéis.
Pero también conozco tus deseos, porque mi madre los tenía. Como los tenían los padres de los pacientes que he tratado.
Sé que eres valiente, que no te rindes. Sé que quieres ver a tu hijo salir de su dolor, que quieres comenzar a ver la luz. Sé que quieres volver a intentarlo, quieres encontrar la solución definitiva para tu hijo. Sé que te atreves a creer que podéis lograrlo, que volveréis a sentir la alegría de vivir juntos. Sé que deseas ver a tu hijo convertido en la persona que puede llegar a ser. Porque sé que amas a tu hijo más que a tu vida.
¿A qué esperas? Atrévete hoy. Ayuda a tu hijo, para que se convierta en una nueva persona libre del poder de las adicciones.
Enrique Rodríguez Márquez, experto en el tratamiento de las adicciones
Enrique Rodríguez Márquez en Masquemedicos