Se han propuesto numerosos modelos para explicar este fenómeno que hoy en día sigue suponiendo la primera causa de muerte no natural, por delante de los accidentes de tráfico, sin que tenga ninguna campaña tan social como estos últimos. En 2014 la cifra anual fue de 3910 personas, puede sonar frívolo hablar de números en estos casos pero una de las medidas de presión para despertar a los factores sociales es ser representativo con lo que esta situación supone. Teniendo en cuenta que además España no es en comparativa con otros países del mundo uno de los más afectados por lo que es un fenómeno mundial.
Factores que inciden en la conducta suicida
Blumenthal y Kupfer propusieron un modelo que me resulta de interés pues fueron capaces de materializar por escrito qué ejes podían suponer esferas de vulnerabilidad para que existieran las conductas destructivas.
La conducta suicida es más probable cuanto mayor es la tasa de existencia de los siguientes fenómenos:
- Factores biológicos. En las tres décadas pasadas, un buen número de evidencias indican que el suicida sufrió de alteraciones en la neurotransmisión serotonérgica, particularmente en la función de dos subtipos de receptores serotonérgicos: el 5-HT1A y el 5-HT2A.
- Rasgos de personalidad: Impulsividad, introversión, rigidez cognitiva.
- Trastornos psiquiátricos.
- Antecedentes familiares. Pueden favorecer la consideración del suicidio como una respuesta viable al contrario de lo que se puede esperar.
- Factores psicosociales. Acontecimientos vitales del individuo. Factores ambientales, enfermedades crónicas…
Se podría llegar a pensar que los factores que llevan a la consumación del suicidio son los iniciales pero la realidad es que la tasa más alta de factores de riesgo en la población se encuentra en estos últimos los factores psicosociales que acaban siendo características más precipitantes que los rasgos de personalidad en sí o un trastorno psiquiátrico.
Se tienen en cuenta observando las estadísticas realizadas por entidades como la OMS que existen tendencias demográficas, hay un porcentaje del doble de suicidios consumados en el sexo masculino y en individuos de raza blanca así como entre los divorciados o viudos.
Ante estos factores es necesario acudir a la consulta de un profesional de la Psiquiatría, quien podrá ofrecer las terapias adecuadas, adaptándose a las necesidades de cada paciente. Por eso en Masquemedicos te ofrecemos la posibilidad de contactar con los mejores psiquiatras de Valencia, Madrid, Palma de Mallorca y todas las ciudades de España, a sólo un clic de distancia.