La madre es una película que por el título podemos creer que está realizada para un auditorio femenino, y la temática como cuyo nombre parece indicar, se dirige hacía la crianza.
Deja los estereotipos de lado, esta película va de relaciones humanas, las relaciones con nuestros hijos, quizá la relación más difícil, y sobre todo de la adolescencia y de lo difícil que es para muchos jóvenes sobrevivir en estos tiempos de caos económico y tantas variables a combatir en cada una de las familias.
La Madre, una película de Alberto Morais
Esta película de Alberto Morais se estrenó recientemente en octubre del 2016, el personaje principal es Miguel, con 14 años ve como su madre se ve envuelta en problemas que hace que los servicios sociales intercedan con el riesgo de quitarle la custodia. La madre en el papel Laia Marull se muestra ausente, poco afectiva, depresiva, apática, produciéndose un cambio de roles donde el hijo es el que intenta responsabilizarse del día a día de ambos aunque por poco tiempo.
Miguel se ve obligado a acudir a casa de una expareja de la madre, que no parece una buena recomendación para el niño, asumiendo que nunca más volverá al mínimo papel de infancia que tenía en su casa. Es una película de pocos diálogos y mucha comunicación no verbal que puede ser visionada en un ámbito de cine social y no sólo como una película para observar en nuestras casas.
El final tiene cierta controversia, muchos lo ven con cierto enfoque politizado a nivel social y otros lo ven como la realidad misma, que en ocasiones preferimos que nos muestren en las películas con un final feliz.
Se estrenó en la SEMINCI de Valladolid con poca repercusión quizá porque no existen muchos giros argumentales y existen películas en la cineteca española que pueden recordar a esta, como El Bola, aunque la edad del protagonista y la temática principal sean totalmente diferentes.
Reflexión tras el visionado de La Madre
Me aparecen en la cabeza preguntas finales difíciles de contestar en este viernes todavía de invierno:
¿Existen muchos mayores que no dan abrazos quitamiedos y que se muestran ausentes ante las necesidades de los jóvenes que tienen a su alrededor porque se ven contaminados por la escasa energía motivacional del entorno?
¿Es en muchas ocasiones el internamiento una medida eficaz para reestructurar la vida de un joven de 14 años?
Si quieres saber cuál es el final de la película, te invito a verla en este viernes de cine y sacar tus propias conclusiones.