Pese a que dentro del campo de las cirugías de la mama el aumento de pecho sigue siendo el rey, no es menos cierto que cada vez son más las mujeres que acuden a las clínicas de cirugía plástica, estética y reparadora demandando todo lo contrario.
No en vano, y según estudios recientes, la reducción de pecho se ha convertido en una de las cirugías con mayor tasa de satisfacción dentro del sector estético. Por esta razón, los cirujanos solemos conocerla como “la cirugía feliz”.
Como su propio nombre indica, la reducción mamaria o mamoplastia de reducción, es una intervención quirúrgica cuyo objetivo principal es reducir el volumen de los senos mediante la eliminación del exceso de glándula mamaria, piel y grasa.
Pero hay que tener muy en cuenta que reducir el volumen de unos senos desproporcionadamente grandes no es el único objetivo de la intervención.
Para que una reducción mamaria sea exitosa el cirujano debe conseguir una pechos simétricos y proporcionados en relación con el contorno corporal de la paciente, situando el complejo areola-pezón en un sitio adecuado.
La paciente que se somete a la intervención mejora su autoestima, tanto física como emocional, ganando confianza en sí misma.
Con la mamoplastia de reducción desaparece la irritación de la piel fruto del roce constante y los dolores de cuello y espalda debido al peso excesivo.
Asimismo, se reduce la incomodidad a la hora de hacer ejercicio físico y llevar cierto tipo de prendas.
Otra de las ventajas que existen es que desaparecen las dificultades relacionadas con la circulación linfática.
¿Cuándo podemos decir que una mama es más grande de lo que debería?
La herencia genética desempeña un papel fundamental en el desarrollo del volumen y la forma de la mama.
Se considera que el pecho está completamente formado a los 17-18 años aproximadamente.
Ahora bien, a lo largo de su vida la mujer va presentando variaciones en esa forma y en ese volumen como consecuencia del periodo premenstrual, de los embarazos y la lactancia, de los cambios bruscos en el peso, del envejecimiento de los tejidos…
Pese a que cada caso es un mundo, y cada cuerpo y físico es diferente, se podría decir -a grandes rasgos- que para hablar de gigantomastia, el pecho debería contar con un volumen aproximado de 650 centímetros cúbicos por cada seno, lo que equivaldría a una copa E.
En casos extremos hemos llegado a intervenir mamas que estaban por encima de los tres kilos de peso por cada pecho.
Es importante remarcar que, a día de hoy, se acepta como volumen mamario “normal”, aquel pecho que oscila entre los 250 y los 450 cc, éstos últimos corresponden a una copa C del sujetador.
El grado de descolgamiento también es un indicativo a la hora de determinar si el volumen de la mama es desproporcionadamente alto. Por ejemplo, una mama es más grande de lo que debería cuando hay 25 centímetros desde la clavícula hasta la areola.
¿Qué tipos de abordajes existen para reducir la mama?
Si la mama no se encuentra a más de 23-24 centímetros de la clavícula hablamos de una reducción muy moderada de tamaño.
Para reducir el volumen se separa la piel de todo el contorno de la mama y se elimina la grasa y la piel como gajos de una naranja. El abordaje es periareolar, es decir, la cicatriz quedará únicamente alrededor de la areola.
Si el pecho se encuentra a unos 25 o 26 centímetros de la clavícula, se realizará una incisión vertical para realizar la corrección del volumen y solucionar la caída de la mama. Se complementa con una liposucción de los laterales de la mama.
Si la paciente sobrepasa los 26 centímetros, lo que equivaldría a un volumen mamario de más de 600 cc, hay que realizar una reducción mayor. Este grupo es el más frecuente y exige una amplia reducción de la piel sobrante.
Para conseguirlo el cirujano realiza una incisión en forma de T invertida, es decir, elimina el exceso de grasa y piel realizando incisiones tanto alrededor de la areola como vertical -como en los casos anteriores- pero además debe realizar otra en el surco submamario.
Clínicas Dr. Moltó, especialistas en reducción mamaria
Dr. Moltó en Masquemedicos