Se llama Iker, tiene nueve meses y dos mamás que le adoran. Ana y Lucía se imaginaban que el amor entre ellas no podía ser más grande y cuando llegó su pequeño milagro descubrieron que aún cabía mucho más amor, y era enorme.
Después de cinco años de relación y de vivir cómo algunas de sus amigas buscaban el embarazo, Ana y Lucía comenzaron a acariciar la idea de tener un bebé de las dos, quererle, abrazarle y cuidarle. Sabían que su homosexualidad no iba a ser un impedimento porque entre sus amigas ya habían abierto el camino que ellas han visto mucho más fácil de recorrer.
Meditaron mucho antes de dar el paso. Sabían que existe un método por el cual ambas pueden ser protagonistas del proceso de la maternidad. El método ROPA cuyas siglas significan recepción de ovocitos de la pareja, les ha permitido disfrutar a ambas del camino, una aportando sus óvulos y sus genes y la otra gestando al hijo de ambas.
En estos casos el boca a boca es fundamental y entre su círculo de amigas ya había alguna pareja de lesbianas que ha sido madre con este método reproductivo. Ellas han confiado en el grupo Instituto Bernabeu para alcanzar su maternidad. En primer lugar por la profesionalidad en el desarrollo de su tratamiento y también por el apoyo y cariño recibido de todas las personas que han participado en él. Ambas reconocen que es la mejor decisión que han tomado en su vida.
¿Cómo se realiza el Método ROPA?
La clínica cuenta con una dilatada experiencia en medicina reproductiva y son muchas las parejas de lesbianas que optan por el método ROPA. La técnica utilizada es sencilla y se realiza todo el proceso de forma impecable. La mujer que aporta sus óvulos se somete a un tratamiento de estimulación ovárica pautada por un ginecólogo experto en medicina reproductiva y cuando estos están maduros se extraen a través de una punción ovárica, en una intervención sin apenas molestias en las que se aplica una sedación ligera.
De forma paralela se prepara a la pareja a quien se pauta un tratamiento hormonal que sirve para preparar su útero y recibir al embrión. Los óvulos se fecundan con semen de donante y se transfieren a la futura madre. Un proceso que viven con gran intensidad ambas y en el que las dos participan activamente.
También se tiene muy en cuenta el aspecto psicológico que comporta someterse a un tratamiento reproductivo. El torrente de emociones que supone someterse a un tratamiento de reproducción asistida se gestiona gracias a las sesiones psicológicas individualizadas que la clínica pone a disposición de las parejas de forma gratuita.
Una familia reconocida legalmente
Para Ana y Lucía fue muy sencillo tomar la decisión y confiar en el equipo de expertos en reproducción asistida para poner en marcha un proyecto de vida tan importante. Se hizo muy fácil el proceso con el que juntas se convirtieron en una familia y dieron a luz a Iker, que tiene dos mamás.
En cuanto a los aspectos legales relacionados con el método ROPA, desde 2007 la Ley española permite la inscripción de la doble maternidad en el Registro Civil, por lo que los niños nacidos de un tratamiento ROPA serán hijos de dos madres a efectos legales.
Instituto Bernabeu, Medicina Reproductiva
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