Los implantes dentales son el mejor tratamiento para reemplazar los dientes perdidos, ofreciendo un resultado natural.
Antes de someterse a este tratamiento, muchos pacientes se preguntan si pueden sufrir algún tipo de complicación. Los estudios realizados demuestran que el 91% de los pacientes no sufre ninguna complicación al colocarse implantes dentales, siempre que mantengan una buena higiene oral y acudan a las revisiones con el dentista cada 6-12 meses.
Sin embargo, los resultados de estas investigaciones también indican que el 9% restante puede sufrir complicaciones, incluso los pacientes que mantienen una excelente higiene bucodental y acuden con regularidad a la consulta.
Los problemas tras la colocación de implantes dentales pueden ser: infección en la zona del implante conocida como periimplantitis, pérdida de hueso maxilar.
Periimplantitis
Cuando un tratamiento con implantes fracasa en etapas avanzadas, la causa suele ser una periimplantitis. Se trata de una inflamación e infección que se forma alrededor del implante, que en el peor de los casos puede llevar a la pérdida de hueso maxilar. El motivo es muy claro, si aparece una infección y ataca la zona donde está colocado el implante, la mandíbula será corroída con el tiempo. En solo unas semanas el implante perderá estabilidad y comenzará a aflojarse.
Los síntomas de la periimplantitis son similares a los de la periodontitis, se observa inflamación de la encía en la zona que rodea el implante, y en un inicio las molestias son leves, por lo que cuando aparece el dolor, puede que la infección haya alcanzado ya el hueso de la mandíbula.
Los tratamientos de la periimplantitis, según el caso y la gravedad, pueden ser: limpiezas profundas y repetidas, cirugía resectiva o regenerativa, o la extracción del implante dental.
Pérdida ósea a causa del uso de pilares cortos
Utilizar pilares cortos en la aplicación de los implantes dentales puede ser causa de una mayor pérdida de hueso en el maxilar, que si se usaran pilares más largos.
Así lo determina un estudio realizado por el Dr. Juan Blanco del instituto de Investigación de la Salud Santiago de Compostela (IDIS).
En dicho estudio se colocaron 44 implantes dentales (6,5- 10 mm de longitud y 3,5- 4 mm de diámetro) en 22 pacientes.
Tres meses después, los implantes con pilares de 1mm tenían una pérdida ósea periimplantaria interproximal (POI) mayor, a la que se había producido en los pacientes con implantes con pilares de 3mm. Lo que viene a decir que la pérdida ósea periimplantaria interproximal es mucho mayor cuando los pilares son más cortos.
Factores que afectan negativamente al implante dental
Algunos factores pueden afectar de manera negativa a los implantes dentales, llegando incluso a ocasionar su pérdida son:
- Tabaquismo: afecta la asimilación del implante por parte del organismo.
- Consumo de drogas y alcohol: inciden negativamente durante el proceso de osteointegración del implante.
- Diabetes: afecta a la salud bucal, y en muchos casos acortan la duración del implante.
Evitar el tabaco, el alcohol y las drogas, mantener un adecuado control de la enfermedad diabética, realizar una higiene dental óptima y acudir a las revisiones con el dentistas, son claves para mantener el buen estado de los implantes dentales, evitando infecciones, pérdida de hueso maxilar e incluso la pérdida definitiva de la pieza dental artificial.
Dra. Pilar Garrido en Masquemedicos
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Resaltar también que, aunque se trata de un tratamiento que cuenta con altos índices de efectividad, no todos los pacientes cuentan con el perfil adecuado para someterse a él. Como requisito principal, el implante debe presentar estabilidad primaria que está directamente relacionada con la densidad ósea que posea.
Si necesitáis más información a cerca de implantes, tenemos una sección en nuestro blog.
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