La reconstrucción mamaria tiene como objetivo principal devolver la forma al pecho o pechos afectados por un cáncer de mama. La decisión de reconstruirse el pecho tras una mastectomía debe ser personal. Hay muchas mujeres que optan por esta opción, pero muchas otras deciden no reconstruirse la mama. En la mayoría de los casos la decisión se basa en la combinación entre el deseo personal, las condiciones médicas y el tratamiento que se siga para combatir el cáncer.
Reconstrucción mamaria al mismo tiempo que la mastectomía
La reconstrucción del pecho se puede realizar al mismo tiempo que la mastectomía, lo que se denomina “reconstrucción inmediata”. Por lo general, es la solución que permite obtener mejores resultados cosméticos. Las mujeres con cáncer de mama precoz, es decir, que se encuentran en un estadio 1 o 2, son las candidatas ideales para la reconstrucción mamaria inmediata. Con este método se consigue un ahorro de la piel del seno natural y se disminuyen las cicatrices. Además, la paciente no tiene la sensación de pérdida del pecho. El beneficio psicológico de esta técnica es evidente.
Conforme el cirujano oncólogo extirpa la mama, el cirujano plástico hace la reconstrucción, ya sea mediante el uso de tejidos de otra parte del cuerpo (técnica autóloga), prótesis, o combinando ambas técnicas. La preparación para el procedimiento, incluyendo la aplicación de la anestesia, puede durar en torno a las dos horas. La reconstrucción mamaria puede prolongarse de una a seis horas, en función del caso a tratar y del tipo de reconstrucción.
La cirugía de colgajo o autóloga utiliza tejidos de otras áreas del cuerpo del paciente como el abdomen, espalda, las nalgas o los muslos para recrear la mama de forma natural. Los colgajos reducen la aparición de problemas a largo plazo asociados con los implantes, como la contractura capsular.
Reconstrucción mamaria tras finalizar el tratamiento
La reconstrucción inmediata no puede realizarse en todos los casos. Si la paciente ha iniciado cualquier tratamiento de quimioterapia o radioterapia se debe posponer la reconstrucción hasta completarlo. Esto significa que la reconstrucción puede realizarse de 6 a 12 meses después de la mastectomía.
Este es el caso de las mujeres con diagnóstico de cáncer en estadio III o estadio IV, un tipo de cáncer que, debido a su tamaño o a la cantidad de ganglios linfáticos afectados, requiere de terapia de radiación u otros tratamientos después de la mastectomía.
Según la situación, el cirujano también puede recomendar que se haga parte de la reconstrucción inmediatamente y terminar la reconstrucción al terminar el tratamiento.
Necesidad de posponerlo para no prolongar la intervención
En otras ocasiones la reconstrucción de la mama exige técnicas complejas. Esto hace que sea conveniente retrasar la reconstrucción para no prolongar excesivamente el cómputo de horas de la intervención. Además, si existen problemas médicos asociados, como puede ser la obesidad o la hipertensión, también se aconseja retrasar la reconstrucción para no poner en riesgo la salud de la paciente.
Dr. Julio Terrén, cirujano plástico especialista en cirugía de senos
Dr. Julio Terrén en Masquemedicos