Dependiendo de la franja de edad, entre el 15 y el 64% de los españoles tiene algún tipo de roncopatía, es decir, ronca mientras duerme. Las personas que están en la década de los cincuenta o de los sesenta son las que más roncan y mucho más si son hombres: el doble que de mujeres. Es algo común y frecuente, donde intervienen otros factores como ser o no fumador, el peso, la postura en la cama y otras muchas cosas.
Pero roncar puede ser algo para tomarse muy en serio. Aparte de ocasionar problemas de pareja -es difícil dormir bien con un ruido de obra a tu lado en la cama-, el ronquido constante puede ser un síntoma de una apnea del sueño, un trastorno que va más allá de la mera molestia y que desemboca en otras consecuencias como falta de descanso, irritabilidad, estado de somnolencia constante e incluso, en estados muy graves, arritmias, insuficiencias cardiacas y otros problemas relacionados con la circulación y el corazón.
Diganosticar la apnea del sueño es algo complicado porque el que la sufre no suele darse cuenta de ella… al estar durmiendo. Es normalmente su pareja o las personas que viven con él o ella los que notan los síntomas, ronquidos, respiración irregular o periodos leves de no respiración.
Si queréis profundizar en este tema desde un punto de vista más profesional, aquí tenéis un artículo de los doctores Javier Vila Martín (de la Clínica Montcada Punt) y Alejandro Ferré Maso que explica todo esto con mucho detalle: El paciente roncador / SAOS: alternativas terapéuticas actuales y criterios de elección (en el blog de Clínica Dental Basi)