La técnica del tiempo fuera es muy utilizada en la psicología clínica sobre todo en el área infantil aunque también resulta muy útil en la terapia de pareja y ante conflictos repetitivos. Es sencilla y su aplicación no supone ningún riesgo sobre todo ya que hablamos de ponerla en práctica con menores.
El tiempo fuera consiste en:
- Seleccionar una situación repetitiva, específica e inadecuada donde el menor pierde el autocontrol y ya sabemos cuáles son las consecuencias más habituales a esa conducta.
- En el momento en el que el niño hace la conducta que se desea eliminar se le aísla de la escena en otro lugar diferente, durante un tiempo que en los niños suele ser un minuto por cada año de vida. El adulto no debe de ir riñéndole por el camino. Simplemente una indicación breve: Ya sabes que coger sus juguetes no lo puedes hacer. Nos vamos un tiempo fuera.
- Se le explica la causa de estar fuera en otro sitio, si el niño no frena, protesta, insulta o patalea no se le hará caso ni se le responderá abriendo un diálogo no efectivo.
- Una vez que pase el tiempo volverá a la sala e intentaremos que retome el contacto de otra forma. Si vuelve a repetirlo se le podrá volver a sacar fuera aumentando el tiempo de estancia y explicándole cuál es la conducta negativa y la deseada.
Es muy importante la selección de la conducta puesto que el tiempo fuera no es útil para conductas simplemente molestas o de intensidad leve. La clave es la constancia, que todos las personas que lo vayan a aplicar sigan el mismo formato. No tiene una efectividad inmediata, entre uno o dos meses dependiendo de la frecuencia de la conducta seleccionada en el niño. No pasa nada si el niño nos ve que controlamos el tiempo pero es importante que no haya distractores para él que sean divertidos porque entonces el tiempo no habrá servido de nada.
Con el adulto el tiempo de aplicación del tiempo será de unos 15 a 20 minutos y solo es efectivo si a posterior de eliminar la agresividad o conducta inadecuada de la escena se habla la problemática intentando otro punto de vista. Si yo discuto con mi pareja y decido que cada vez que voy a contestar mal al otro es mejor irme y luego hacer como si no hubiera pasado nada es eso es evitar el problema y tarde o temprano se creará otra situación más grande.
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