La enfermedad de Peyronie es un problema en el que se forma una placa en la zona del pene que provoca que este se curve hacia el lado en el que se encuentra esta zona dura.
Esta enfermedad puede ocurrir de forma leve, desapareciendo en un plazo de 6 a 18 meses. En los casos severos la placa se endurece aún más y produce dolor en el pene. Cuando la incurvación del pene es pronunciada puede impedir la penetración durante el acto sexual.
Cuando la placa se encuentra en la parte superior e interior del pene, puede reducirse el tamaño de este.
¿A quién afecta la enfermedad de Peyronie o incurvación de pene?
Un estudio reveló que esta enfermedad se presenta en el 1% de los hombres. Siendo el rango de edad más frecuente entre los 40 y los 50 años, aunque también se han observado casos de incurvación del pene a causa de esta enfermedad en jóvenes y ancianos.
La enfermedad de Peyronie no afecta a un grupo de edad determinado, y se cree que podría ser una patología hereditaria ya que se han observado casos en diversos miembros de una misma familia.
Síntomas de la enfermedad de Peyronie
Los pacientes suelen acudir a consulta médica por sufrir dolor y dificultad para mantener relaciones sexuales.
La dureza de la zona que se ve afectada por la induración puede causar impotencia sexual en el hombre.
Las causas de esta enfermedad no han sido aclaradas, algunas investigaciones indican que se produce por un traumatismo que provoca un sangrado interno en la zona afectada del pene, teniendo como consecuencia una inflamación que curaría lentamente.
Esta inflamación puede hacerse crónica si se produce otro sangrado antes de que se solucione el primero. El resultado es un endurecimiento permanente de los tejidos (fibrosis), que puede llegar incluso a causar calcificación en algunas zonas del pene.
Tratamiento de la enfermedad de Peyronie o incurvación de pene
En algunas ocasiones y sin saber el motivo, la placa desaparece espontáneamente, por esta razón se aconseja esperar entre uno y dos años antes de intentar solucionarlo mediante una cirugía.
Los tratamientos no quirúrgicos no han conseguido demostrar su efectividad sobre esta enfermedad. Algunos médicos recomiendan utilizar la vitamina E o el complejo vitamínico B por vía oral. En algunas investigaciones se han intentado inyectar directamente en la placa agentes químicos como colagenasa, corticoides, dimetilsulfoxido, etc, sin lograr resultados alentadores.
También se ha aplicado radioterapia a bajas dosis sobre el pene, pero los resultados no han sido los esperados, no sólo no han obtenidos beneficios para corregir la incurvación del pene, sino que han aparecido efectos negativos.
Para corregir este problema existen dos tratamientos quirúrgicos:
- Extirpación completa de la placa. Seguidamente se coloca un parche de piel o material artificial.
- Extirpación de una franja de tejido contrario de la placa, sin actuar directamente sobre esta. Esta es la técnica más utilizada, y se conoce también con el nombre de operación de Nesbit en honor del cirujano que la describió.
Es importante que los pacientes tengan en cuenta que con esta intervención el tamaño del pene se puede producir acortamiento hasta 2 centímetros.
En los casos en que existe impotencia sexual a causa de la enfermedad de Peyronie, es posible colocar una prótesis de pene (cilindros de silicona que se colocan en el pene).
¿Qué sucede si no se trata la enfermedad de Peyronie?
Si se padece esta enfermedad y no se le da el tratamiento adecuado, puede empeorar provocando cada vez más dolor en el pene al tener una erección. Además, el problema puede ir a peor haciendo imposible las relaciones sexuales. Además, en algunos casos ha derivado en problemas de impotencia en el hombre.
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