Elevación vs aumento de pecho: ¿cuál es la mejor opción para mí?
Mirarse al espejo y sentir que nuestra imagen exterior no se corresponde con cómo nos sentimos por dentro es una sensación común para muchas mujeres. El pecho es una de las zonas que más influye en la silueta femenina y, por ende, en la autoestima y seguridad personal. Sin embargo, cuando se toma la decisión de mejorar el aspecto del busto, surge una de las dudas más frecuentes en consulta: “¿Necesito ponerme implantes o simplemente necesito elevar lo que ya tengo?”.
A menudo, los términos se confunden o se solapan. En Clínicas Dorsia, líderes en cirugía de pecho en España, sabemos que la información es el primer paso para una decisión acertada. Por eso, hoy queremos desgranar las diferencias entre el aumento de pecho (mamoplastia de aumento) y la elevación de pecho (mastopexia), para ayudarte a entender qué procedimiento se adapta mejor a tus necesidades y objetivos.
Aumento de pecho: buscando volumen y forma
El aumento de pecho es, sin duda, la cirugía estética más demandada a nivel mundial. Su objetivo principal es claro: incrementar el tamaño de los senos y mejorar su forma.
Esta intervención es la ideal para mujeres que, por genética, tienen un pecho poco desarrollado (hipoplasia mamaria) o que han perdido volumen tras una pérdida de peso significativa o tras la lactancia, quedando el pecho “vacío” en su polo superior, pero sin una caída excesiva.
¿En qué consiste?
La técnica se basa en la colocación de un implante (prótesis) que aporta la proyección y el volumen deseados. En Clínicas Dorsia, apostamos por técnicas novedosas y vanguardistas, como la técnica AMI (Augmentation Minimally Invasive), diseñada para facilitar una recuperación más rápida y resultados naturales y la técnica BRST, la más rápida, segura y mínimamente invasiva del mercado.
Existen diferentes tipos de abordaje (por dónde se introduce la prótesis) y planos de colocación (detrás del músculo o de la glándula), así como tipos de implantes (redondos o anatómicos). La elección de uno u otro dependerá de la anatomía de la paciente y del consejo del equipo médico experto, que buscará siempre la armonía corporal por encima de un tamaño exagerado.
Mastopexia: la solución contra la gravedad
Por otro lado, tenemos la mastopexia, conocida popularmente como elevación de pecho. Aquí el problema principal no es necesariamente la falta de tamaño, sino la posición del pecho.
Con el paso del tiempo, la piel pierde elasticidad. Factores como la gravedad, los embarazos, la lactancia o los cambios bruscos de peso provocan lo que médicamente se conoce como ptosis mamaria: la caída del pecho. El pezón desciende y se sitúa por debajo del surco submamario, dando una apariencia de pecho caído o triste.
¿Para quién es la elevación?
Si sientes que tienes el volumen adecuado (o incluso excesivo), pero tu pecho “mira hacia abajo” o notas que la piel ha cedido, la mastopexia es tu opción.
En esta intervención, el cirujano elimina el exceso de piel y remodela el tejido mamario para devolver el pecho a una posición más alta y juvenil. Además, se suele reposicionar la areola y el pezón para que queden centrados en la nueva forma del seno. A diferencia del aumento, la mastopexia por sí sola no aumenta la talla de sujetador; de hecho, al eliminar piel sobrante, el pecho puede parecer ópticamente más compacto y firme.
Mastopexia con prótesis: lo mejor de dos mundos
Aquí es donde entra el matiz importante que a menudo explicamos en Clínicas Dorsia: muchas veces, no hay que elegir entre una u otra, sino combinarlas.
Es muy habitual que una mujer presente el pecho caído y, a la vez, haya perdido volumen glandular (el típico caso de pecho “vacío” tras la lactancia). En estos casos, si solo elevamos el pecho, puede quedar una forma bonita pero pequeña. Si solo ponemos un implante, el peso extra podría hacer que el pecho caiga aún más rápido o crear un efecto poco estético conocido como “doble burbuja”.
Para estas pacientes, la mastopexia con aumento es la técnica de vanguardia ideal. En un mismo acto quirúrgico, el equipo médico eleva el tejido, elimina la piel sobrante y coloca un implante para rellenar el polo superior y dar esa forma redondeada y juvenil que muchas pacientes desean.
Diferencias clave para tu autodiagnóstico
Aunque la última palabra siempre la tendrá el especialista, puedes hacerte algunas preguntas frente al espejo para intuir qué necesitas:
- Observa la posición del pezón: ¿Está por encima o por debajo del pliegue que se forma bajo tu pecho (surco submamario)? Si está por debajo, probablemente necesites una elevación.
- Valora el volumen: ¿Te gusta tu talla si usas un sujetador con relleno (push-up) o simplemente quieres que tu pecho natural esté más arriba? Si quieres más talla, necesitas aumento (con o sin elevación).
- La elasticidad de la piel: si tu piel está muy flácida, un implante por sí solo no suele ser suficiente para “estirarla”; se requiere quitar piel (mastopexia).
La importancia de un equipo médico experto
Tanto la elevación como el aumento de pecho son cirugías seguras y con altísimos índices de satisfacción, pero requieren de manos expertas y cualificadas. No se trata solo de “operar el pecho”, se trata de entender la arquitectura del cuerpo de cada mujer.
En Clínicas Dorsia, nos enorgullece contar con un equipo de cirujanos plásticos de primer nivel que dominan las técnicas más avanzadas. Utilizamos, por ejemplo, técnicas de sutura interna para que las cicatrices sean lo menos visibles posible y protocolos de recuperación que permiten a la paciente volver a su vida normal en poco tiempo.
La elección entre elevación o aumento no debe basarse solo en lo que le funcionó a una amiga o en lo que vemos en redes sociales. Cada tórax es único, y factores como la anchura de la espalda, la calidad de la piel y la simetría mamaria son determinantes para trazar el plan quirúrgico.
Tu mejor versión te espera
Decidir someterse a una cirugía de pecho es un paso importante hacia el empoderamiento y la mejora de la autoestima. Ya sea que busques recuperar la firmeza perdida con una mastopexia o potenciar tus curvas con un aumento de pecho, lo fundamental es que el resultado te haga sentir tú misma, pero con mayor confianza.
No te quedes con la duda. La mejor forma de saber qué opción es la ganadora para tu caso particular es acudir a una valoración profesional. En Clínicas Dorsia, te ofrecemos un diagnóstico personalizado y gratuito para explicarte, con todo detalle y cercanía, cuál es el camino para conseguir el escote que siempre has deseado.
Clínicas Dorsia en Masquemedicos
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