Recomendaciones después de la transferencia del embrión
Después de llevar a cabo la transferencia embrionaria en un tratamiento de Fecundación in Vitro o de ovodonación, comienza la betaespera: periodo donde ocurre la implantación del embrión en el útero y que finaliza con la prueba de embarazo.
No obstante, muchas mujeres se preguntan si existen medidas que puedan tomar para incrementar sus probabilidades de concebir. A continuación compartimos algunos consejos.
Consejos para aumentar las probabilidades de embrazo, tras una transferencia embrionaria
Aunque lo recomendable es llevar una vida normal y evitar el estrés, existen algunas pautas que podrían seguirse.
No tomar fármacos que no hayan sido indicados por el médico
El único tratamiento que se debe seguir es aquel prescrito por el ginecólogo para mantener los niveles adecuados de progesterona. Su objetivo principal es mantener la funcionalidad del cuerpo lúteo hasta aproximadamente la semana 12-14. A partir de ese momento, el médico puede reducir o eliminar la dosis, ya que la placenta produce suficiente progesterona como para no requerir medicación externa.
En caso de experimentar cualquier tipo de molestia, como dolor de cabeza o de muelas, se recomienda contactar con el médico responsable del tratamiento para obtener su consejo acerca de qué medicamento tomar.
Mantener una alimentación saludable
Se recomienda seguir una dieta equilibrada, que incluya variedad de alimentos y sin restricciones excesivas. Sin embargo, se aconseja moderar el consumo de café y alcohol, limitándolos a situaciones ocasionales. En caso de experimentar problemas de estreñimiento, se sugiere incorporar alimentos ricos en fibra a la dieta.
Guardar reposo
Después de la transferencia embrionaria, se aconseja descansar durante al menos 30 minutos antes de abandonar la clínica. Una vez en casa, la paciente puede retomar su rutina diaria sin problemas. Sin embargo, se recomienda evitar esfuerzos físicos importantes, como levantar objetos pesados o realizar ejercicios intensos, para no interferir con el proceso de implantación.
Mantener una actitud positiva
Mantener una actitud positiva es fundamental durante el proceso, evitando situaciones de ansiedad y estrés, y no obsesionarse con los resultados. Aunque es común sentirse nervioso en esta fase, se recomienda alejar los sentimientos negativos. Realizar actividades de ocio puede ser beneficioso para reducir la incertidumbre y distraer la mente.
Beber gran cantidad de líquidos
Se recomienda beber muchos líquidos, comprobando que la orina es normal. También es conveniente, reducir el consumo de sal.
Continuar con las actividades diarias
Mientras se eviten las actividades que impliquen un esfuerzo físico excesivo, no existe ninguna restricción en realizar las tareas cotidianas habituales, tales como pasear, conducir o trabajar.
Evitar los baños de inmersión
Para evitar posibles infecciones y minimizar la influencia de los medicamentos, se aconseja no tomar baños en bañeras, piscinas o aguas termales. Además, es recomendable evitar las saunas, cabinas de bronceado y la exposición al sol prolongada, así como cualquier otra actividad que pueda elevar la temperatura corporal.
Evitar las relaciones sexuales hasta la prueba de embarazo
Se recomienda evitar mantener relaciones sexuales hasta realizar la prueba de embarazo.
Síntomas después de la transferencia embrionaria
Los síntomas experimentados después de la transferencia embrionaria pueden variar de una mujer a otra y también entre diferentes embarazos en una misma mujer. Tampoco hay que preocuparse si no se siente ningún síntoma, ya que algunas mujeres pueden tener una implantación exitosa sin experimentar ningún síntoma.
Es importante destacar que los síntomas pueden ser el resultado de la medicación suministrada durante el tratamiento o del propio embarazo, y no son indicadores definitivos del éxito o fracaso del proceso de implantación. Los más comunes son los siguientes:
- Es posible que la mujer experimente un flujo vaginal abundante. Esta situación es común debido a cambios hormonales y a la progesterona que se ha administrado por vía vaginal durante el tratamiento.
- Antes de la transferencia embrionaria, es posible que la mujer experimente cambios en sus senos debido a la administración de estrógenos y progesterona durante el tratamiento.
- Pequeños sangrados después de la transferencia embrionaria, los cuales son causados por la canalización a través del cuello uterino durante el procedimiento. Estos sangrados suelen aparecer entre dos y tres días después de la transferencia y pueden durar algunos días.
- Fatiga después de la transferencia embrionaria debido al aumento de progesterona en el cuerpo. Es importante tener en cuenta que la fatiga no es necesariamente un signo de embarazo, ya que también puede ser causada por la medicación de progesterona.
- Las hormonas utilizadas en la preparación del endometrio o en la estimulación ovárica pueden causar molestias en la zona lumbar y abdominal.
- Micciones frecuentes por la hormona hCG, tanto por la inyección administrada como por el embarazo.
- Náuseas por el aumento de los niveles hormonales.
La mejor recomendación después de realizar una transferencia embrionaria, es seguir al pie de la letra las indicaciones del equipo médico, para lograr así el esperado embarazo. Si tienes dudas o presentas algún síntoma que te preocupe, no dudes en consultar con tu clínica de reproducción asistida.
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