Código de barras: ¿Qué son y cómo tratar las arrugas peribucales?
Los labios no se salvan del efecto del envejecimiento de los tejidos. Las arrugas peribucales, a las que se conoce coloquialmente como arrugas de “código de barras”, son un tipo de arruga vertical que aparece alrededor de la boca, especialmente encima del labio superior.
Estas arrugas van apareciendo de manera gradual, como consecuencia de la gesticulación del rostro; cada vez que hablamos, comemos, besamos o sonreímos, la musculatura de la zona se mueve, dejando marcas de expresión.
Además, a esto hay que sumarle que con el paso de los años se va perdiendo colágeno, ácido hialurónico y se debilita la estructura ósea y muscular de la zona.
Se recomienda tratar la zona de la boca en fases iniciales, es decir, antes de que el labio pierda su forma y se aplane, y antes de que las arrugas se consoliden alrededor de la boca y sean visibles sin que haya gesticulación de ningún tipo.
Es importante remarcar que con los nuevos procedimientos estéticos desarrollados es posible recuperar la apariencia juvenil de la boca sin necesidad de cirugías invasivas.
Tratamiento de las arrugas “código de barras”
Una de las maneras más sencillas de corregir las arrugas “código de barras” es mediante la infiltración de ácido hialurónico.
Como bien hemos explicado en otros artículos, el ácido hialurónico es una sustancia que produce nuestro propio organismo. Es una sustancia con propiedades diversas que ayuda a la captación de agua, aportando volumen, elasticidad y firmeza.
El problema es que la producción de ácido hialurónico desciende a medida que envejecemos, lo que se traduce en una pérdida de hidratación y firmeza en los tejidos de la epidermis.
El ácido hialurónico es una sustancia totalmente biocompatible que no produce efectos secundarios, nuestro organismo lo reabsorbe con el paso del tiempo, consiguiendo unos resultados naturales y muy satisfactorios.
Las arrugas se atenúan mediante la aplicación de microinyecciones de ácido hialurónico reabsorbible directamente sobre ellas. Para evitar molestias, se aplica previamente un anestésico local. Es un tratamiento que no deja ningún tipo de señal externa; tan solo puede aparecer algún pequeño hematoma que desaparece a los dos, tres días.
Se suelen emplear ácidos hialurónicos de diferente reticulación y textura para perfilar, realzar, recuperar el volumen y mitigar los signos del envejecimiento en las determinadas zonas del labio.
El objetivo fundamental del tratamiento es mejorar la boca de manera natural sin deformarla. Cada paciente es un mundo, hay que tratar de manera individualizada cada caso, ya que las formas y las proporciones que funcionan en unos labios pueden ser desastrosas en otros, y viceversa.
Los resultados tras aplicar el ácido hialurónico son inmediatos, se ven tras la primera sesión, y van mejorando con el paso del tiempo. En la mayoría de los casos, basta con una única sesión acompañada de su posterior revisión por si es necesario algún retoque para lograr el resultado deseado.
Una vez realizado el tratamiento, el paciente puede hacer vida normal de manera inmediata. La duración del ácido hialurónico en el organismo fluctúa de 12 a 18 meses, dependiendo de los hábitos de cada paciente.
El tratamiento puede complementarse con la aplicación de Botox en la zona, para disminuir la fuerza de la musculatura y reducir la aparición de nuevas arrugas de expresión, o con la realización de una mesoterapia facial, una técnica que consiste en la aplicación directamente en la zona de un compuesto de principios activos que hidratan y aumentan la producción de colágeno y elastina.
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Dr. Moltó en Masquemedicos
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